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| Ilustración de Jack Mircala |
Como una construcción de mil colores que en el pasar de las horas se convierte en un sueño de papel. Aquí estoy, en una desdicha sin versos, ni poemas. En una melodía tan silenciosa y vagabunda que puede camuflarse en el resplandor. Finalmente no soy nadie, soy como una figura inanimada que en medio de dos pensamientos pretende libertad. Simplemente así, como una construcción de mil colores, soñada y escrita, anhelada y efímera. Caí en este vacío, de pocos movimientos, de un millón de pensamientos que no puedo expresar. Algunos días las ganas de escapar son mas fuertes y pretensiosas, entonces suelo soñar con lugares habitables de formas inimaginadas, en donde están las voces de aquellos que me ven, y las letras de aquellos que me escriben. Algunos días solo soy yo, inmóvil, de piel blanca como la espuma, de oídos sordos, de días negros sin despertar. Otros días como hoy, pretendo, pretendo escuchar, pretendo responder, tan solo pretendo ser, pretendo escribir y desear más que nunca. Algunos otros momentos pretendo que me escuches y que llegues al lugar de mil colores que construyo para ti y para mi, solo allí siendo un sueño de papel, puedo regalarte un millar de movimientos, un mundo entero de palabras y respuestas, puedo darte al menos un segundo
de mi libertad.
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